Comenzando con la majestuosidad de Monte Albán, una antigua ciudad zapoteca en lo alto de una montaña. Este sitio arqueológico impresiona con sus pirámides, patios y observatorios, ofreciendo una ventana al pasado de la civilización zapoteca y vistas panorámicas que quitan el aliento.
Continuando hacia Arrazola, nos adentramos en el colorido mundo de las "alebrijes", figuras fantásticas talladas en madera y pintadas a mano. Los artesanos locales han perfeccionado esta técnica, creando criaturas vibrantes y únicas que reflejan la rica imaginación de la cultura mexicana.
En Coyotepec, la cerámica negra se convierte en protagonista. Aquí, los alfareros dan forma a sus creaciones utilizando técnicas ancestrales para producir piezas únicas y elegantes. La cerámica negra de Coyotepec es apreciada por su belleza y calidad artesanal, mostrando la habilidad transmitida de generación en generación.
La visita a Cuilapam de Guerrero nos transporta a la historia colonial de México. El exconvento de Cuilapam, construido en el siglo XVI, cuenta con una arquitectura imponente y un pasado significativo. Este lugar fue testigo de eventos clave en la historia de la independencia de México, brindando a los visitantes una visión fascinante de los acontecimientos pasados.